En ADOC, creemos que un par de
zapatos puede contar una historia. La
nuestra, forjada por un joven
emprendedor, se ha convertido en un
legado de tradición, calidad y estilo para
las familias centroamericanas.
Lo que nos diferencia no es solo el calzado que creamos, sino la misión que nos inspira: hacer que el mundo camine mejor.
En 1953, con apenas 28 años, poca
experiencia y recursos limitados, don
Roberto tomo la decisión de iniciar en
una aventura empresarial y dio vida a un
sueño noble y ambicioso de “calzar a los
salvadoreños más necesitados”
Inauguró una pequeña fábrica en el Bulevar del Ejército, Soyapango, El Salvador, donde se fabricaban apenas 100 pares de zapatos al día y es así como nace la historia de ADOC y consecuentemente la industria de calzado en Centroamérica.
Durante más de siete décadas, hemos calzado a millones de personas en Centroamérica. Gracias a la pasión de nuestro equipo de ADOCKERS, hoy somos líderes en retail y manufactura, con presencia en más de 6 países. Nos adaptamos a las tendencias globales para ofrecer siempre las mejores marcas y un servicio excepcional a través de nuestra plataforma omnicanal.
Ser un ADOCKER es llevar la
historia en cada paso.
Somos la familia que, con pasión y compromiso, custodia un legado de 72 años iniciado por don Roberto. Ser un ADOCKER es más que un nombre: es vivir y practicar nuestros valores cada día, sirviendo dentro y fuera de nuestra compañía.
Nuestras marcas
“Nuestras marcas están aquí para inspirarte a expresarte con confianza en cada paso de tu vida. Descubre productos diseñados para acompañarte en tu camino de éxito”
IMPACTO SOCIAL
Hacemos propio el llamado a impactar positivamente a nuestra comunidad y el mundo. El impacto social es la base de nuestra cultura, guía nuestra misión y se refleja en cada una de nuestras iniciativas.